Rock y Roll: Diario de un rescate, Parte 2

Synopsis: Rock y Roll eran animales obedientes pero desconfiados. Sus ojos carecían de expresión y estaban nublados en algunos puntos, y su pelaje era aceitoso y sin brillo, algo que no es evidente en las fotografías. Sus cascos se veían irregularmente recortados y fuera de balance, con anillos de estrés laminar prevalentes en las cuatro patas de cada mula. Habían estado inflamados más de una vez y sus cuerpos estaban plagados de tejido cicatrizado. Roll se inclinaba a la derecha y caminaba girando hacia la pata trasera derecha. Rock tenía que levanter y rotar su pata trasera derecha -que se veía calcificada y limitada en todas las articulaciones-hacia un lado para poder caminar hacia delante. Ninguna de las mulas podía avanzar libremente con ayuda de sus hombros y caderas, ni mover los pies en una manera rítmica normal. Había atrofia muscular en todo su cuerpo y sus estómagos colgaban de la columna vertebral, sin musculatura aparente en la línea superior. Había esperanza de una cierta recuperación en Roll, pero cuando la respetada masajista equina Joanne Lang, Terapeuta Certificada de Masaje Médico, y yo evaluamos a Rock, sabíamos que sería limitado lo que podríamos hacer por él. Las dos sabíamos que nos preparábamos para sufrir, pero por el bien de Roll, acordamos que intentaríamos que Rock estuviera cómodo la mayor cantidad de tiempo posible.